Ajustes presupuestales
Descripción de la publicación.Los ajustes al presupuesto anticipan una nueva batalla entre el Gobierno y el Poder Judicial
9/27/20232 min read
El presupuesto para 2024 comienza a perfilarse como el más importante para el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador y también el más disputado del sexenio. López Obrador requiere de una bolsa robusta que le permita, en el último año de su Administración, concluir los proyectos clave de infraestructura y ensanchar el fondo para financiar los programas sociales para los pobres. El telón de fondo es que el próximo año no solo es el último del sexenio: también se celebrarán unas elecciones presidenciales y legislativas en las que el oficialismo se juega su continuidad. En la Cámara de Diputados, Morena y sus aliados intentan sobreponerse a las amenazas de ruptura del grupo fiel a Marcelo Ebrard y aprobar con su tambaleante mayoría el paquete de egresos anhelado por el presidente. El grupo oficialista ya explora los ajustes y tiene entre manos un recorte millonario al Poder Judicial, con cuya titular, la ministra Norma Piña, López Obrador ha sostenido un pulso desde hace meses.
La relación institucional está prácticamente rota. La última muestra fue la no invitación de Piña a los actos conmemorativos de la Independencia por parte del Ejecutivo. Un acto simbólico sin precedentes recientes. La campaña de López Obrador contra los jueces ha escalado durante los últimos meses con señalamientos personales y acusaciones de corrupción, que van más allá de la estrategia polarizadora de considerar al poder judicial como parte del bando adversario de “los conservadores”. Fuentes judiciales confirman que la hostilidad no se limita solo a las declaraciones públicas. Los canales de comunicación han saltado por los aires y todo parece encaminado a un nuevo choque de trenes de aquí a finales de año, seguramente la última gran batalla en la agenda de López Obrador.
Piña solicitó en agosto un presupuesto de casi 85.000 millones de pesos para el Poder Judicial, que comprende a la Suprema Corte de Justicia, el Consejo de la Judicatura y el Tribunal Electoral federal (TEPJF). López Obrador consideró que la bolsa solicitada era excesiva y volvió a cuestionar los fideicomisos para el pago de prestaciones médicas y pensiones de jueces. Según información pública, los tres órganos del Poder Judicial tienen en conjunto 12 fideicomisos con un saldo con casi 15.500 millones de pesos. Aunque eliminar esos instrumentos para liberar los fondos requiere de un trámite legislativo de otro tipo (es decir, no relacionado con la elaboración del paquete económico anual), el señalamiento de López Obrador fue un anuncio velado de lo venidero.
Funcionarios judiciales consultados por este periódico estiman que la reducción al presupuesto será de al menos 6.000 millones de pesos y se aplicará específicamente al gasto de la Judicatura y la Corte. La bancada oficialista busca formar mediante reasignaciones de diversas dependencias una bolsa de 10.000 millones de pesos para destinarlos a los proyectos de infraestructura y los programas sociales. Parte de esa bolsa se financiará con un recorte ya acordado con el INE de 3.500 millones de pesos —pensados originalmente para una posible consulta popular—; el resto provendrá del Poder Judicial, han afirmado las fuentes.